Diagnóstico por la Imagen
La Resonancia Magnética (conocida como MRI) se utiliza cada vez más, ya que la resolución de la imagen que ofrece es muy superior a la de los sistemas de radiodiagnóstico tradicionales y no irradia al paciente, permitiendo obtener gran cantidad de información fiable y de forma inmediata, incluso en los planos sagital y frontal.
Mediante un intenso campo magnético y ondas de radiofrecuencia se pueden obtener imágenes de órganos y estructuras internas de los seres vivos. El campo magnético induce la alineación de los átomos de hidrógeno presentes en las células y las ondas de radiofrecuencia hacen que las diferentes moléculas irradien energía a distintas frecuencias.
La pieza clave del equipo de resonancia magnética es un imán de material superconductor cuya bobina debe refrigerarse para mantenerla a una temperatura próxima al 0 absoluto (-273ºC). Esto sólo puede conseguirse utilizando líquidos criogénicos, habitualmente, Helio.
Carburos Médica ofrece el servicio MRI ºCold Service para asegurar una refrigeración continuada y conservar el magneto.